Ha sido un secreto guardado con mucho celo por parte de los responsables municipales, pero el golpe de efecto que el equipo de gobierno local pretende dar con vistas a las municipales no era, como se presuponía, organizar la Vuelta Ciclista a Jerez en 2015, ni regalar papelones de pescaíto frito y medias botellas en la próxima Feria del Caballo. El proyecto estrella del equipo municipal se llamará Eurovergas, un parque temático del vicio y el pecado que se implantará en el entorno de la plaza Belén previa recuperación del mítico Rompechapines y que prevé generar cientos y cientos de puestos de trabajo y atraer a un altísimo flujo de visitantes.
A pesar de que este proyecto choca frontalmente con los más elementales principios de la moralidad nacional católica, los responsables eclesiásticos estarían dispuestos a firmar un convenio para ver con buenos ojos esta iniciativa a cambio de aprobar la Ordenanza Municipal de Indulgencias, una especie de tasa a cambio de obtener el perdón por los numerosos pecados mortales que se cometerán en este macroespacio para la lujuria que incluye casinos y casas de citas a la manera del barrio rojo de Amsterdam. Un asunto, este último, que está pendiente de regulación por parte del Gobierno central.
Los afamados arquitectos suizos Herzogcho y Deputón serán los responsables de dar forma a un proyecto que tendrá como figura icónica un monumento a María la Pajillera y un enorme obelisco de granito y de forma fálica de 12 metros de altura que coronará la plaza Don Tico. La idea es que el proyecto, en el que ya se trabaja a destajo, esté muy avanzado antes de las próximas erecciones.
Sr. Miércoles.
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