El gordo de Navidad tocará esta vez en Jerez.
Después de años de insistencia (en los que la administración central desoyó
sistemáticamente los ruegos que se hacían desde el Ayuntamiento) ha llegado por
fin la hora de ver cumplido este sueño: casi trescientos millones caerán en la
ciudad gracias al sorteo extraordinario del lunes.
Concretamente van a caer unas cuantas
fracciones del primer premio, una serie completa del quinto, sin despreciar la
pedrea, que estará muy repartida gracias a las participaciones que está regalando
un bar de La Constancia a todos los clientes capaces de beberse de un trago una
jarra de mosto.
Este milagro económico va a ser posible
gracias a la especial sintonía que existe entre el actual Consistorio jerezano
y el Gobierno de España. Según el testimonio de la limpiadora que Jerez Crack
mantiene infiltrada en dependencias municipales, el acuerdo se cerró durante la
madrugada del pasado jueves, tras una larga negociación con los responsables de
Loterías y Apuestas del Estado en la que no faltaron ni los pestiños ni el buen
cante.
-Ha sido un logro para la ciudad –nos detalla
Ignacia-, ya que las elecciones están a la vuelta de la esquina y hay codazos
entre los alcaldes de toda España para conseguir un premio de estos.
El premio llega tarde, pero ha llegado, que es
lo importante, y más en estos momentos de tanta necesidad. Si echamos la vista
atrás, la deuda histórica contraída con Jerez se remonta a la era Pacheco,
cuando el líder andalucista intentó atraer la suerte ofreciendo el bingo del
Mamelón para celebrar el sorteo en 1985 y la organización hizo oídos sordos a
la oferta.
Pero esta vez la operación está cerrada. Para
evitar suspicacias, los agraciados han preferido permanecer en el anonimato
hasta que no se canten los números el día 22. Eso sí, han prometido que en el
momento de cobrar el premio harán una generosa donación de macarrones al comedor
de El Salvador.
Por su parte, los alumnos de San Ildefonso han
sido aleccionados para que saquen las bolas del bombo con la mayor naturalidad.
Jerson Martínez y Sheila García,
que serán los encargados de cantar el gordo a eso de las diez y cuarto, han recibido
formación en Marsella. Su monitor en el curso, nada menos que el presidente de
la UEFA, Michel Platini, se limitó a declarar que en estos sorteos no hay
trampa ni cartón y que el gordo terminará en cinco. Pero lo dijo en francés,
que no tiene tanta gracia.
Sr. Viernes.
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